martes, 1 de septiembre de 2009

EL ROMÁNTICO DEL HOSPITAL

Hoy soy un autoconvocado. Un autoconvocado que quita su colaboración y que hace paros; que todas las semanas va a una plaza a sostener banderas, estallar bombas y entonar cánticos cual antipático barrabrava en una cancha de futbol. Es todo muy raro. Me siento tan extraño… Quizás la causa de mi malestar se deba a una sencilla razón: a esta hora todos deberíamos estar en nuestros hospitales, ayudando a la gente que más lo necesita (a la gente de José). Pero estamos en la plaza, estamos contemplando (como bien dijo algún periodista) “la rebelión de las casacas blancas”.
Y entonces me pregunto, como muchos de Uds. se deben estar preguntado varias veces ya: ¿que hago acá?, ¿para que estudié tanto tiempo?, ¿para que pasé tantas noches con hambre, con frío y con sueño en mi residencia?, ¿para que??. ¿Porque no me fui?, ¿porque no huí de toda esta basura cuando tuve la oportunidad de hacerlo?.. ¿Por qué??
Cuando comenzamos con nuestros “utópicos” proyectos hospitalarios ya hace algunos años, muchos nos catalogaron de idealistas (léase loquitos entusiastas)... Yo en realidad prefería el mote que usaba en aquellos tiempos un amigo y colega: “romántico del hospital”. Y la verdad es que éramos un grupo de románticos, idealistas, apasionados, entusiastas, loquitos, que se yo... Mucha gente se acercó a decirme en aquel entonces (algunos con buenas y otros con maléficas y oscuras intenciones) que no malgaste mi tiempo, que el HOSPITAL no valía la pena, que es siempre lo mismo, que la plata estaba en otro lado, que no sea un triste medicucho de HOSPITAL... Pero en ese tiempo yo creía fervientemente (y creo aun) en la esencia de una simple frase: “Cree en el milagro de lo que hace el trabajo, de lo que puede hacer la ciencia, de lo que puede hacer el hombre...”
Así seguimos trabajando, contra viento y marea. Con amigos y contra enemigos, con largas jornadas de trabajo, con creciente demanda y escasos recursos, con inexplicables presiones y tibios apoyos, pero siempre dejando el alma y la vida por nuestro HOSPITAL, por nuestros enfermos, por nuestras gorditas… Estábamos (como dirían los redonditos de ricota) con “los ojos ciegos bien abiertos”… Y en lo personal no me arrepiento y espero que mis románticos compañeros de aquella época tampoco, porque ayudamos a muchísima gente en ese tiempo.
Pero hoy es diferente. Hoy me siento un poco triste, abatido y desilusionado. Eso es lo que consiguieron los zares de la salud pública con sus políticas primermundistas erróneamente implementadas. Consiguieron abatirme, aniquilar mis sueños de tener el mejor HOSPITAL PÚBLICO del mundo… Pero también consiguieron despertarme, abrirme los ojos (y ya no ciegamente)… Consiguieron llevarme junto a todos Uds. a la plaza de la dignidad...
Hace 10 años que trabajo para mi HOSPITAL (muchos de ellos en mi época de estudiante). Gracias a Dios me encontré con gente que me inculcó el amor por esta profesión, el amor por la gente, la pasión por ayudar al que realmente no tiene nada, a los que no tienen nada de verdad… Esos que van a mi HOSPITAL… Esos que nuestros gobernantes dicen ayudar, esos que dicen defender, esos que le quitan el sueño al Sr. Gobernador… Y yo me pregunto una y otra vez: ¿como es posible ayudar y defender a la gente si no la conocen?, ¿acaso ellos saben lo que esa gente necesita?, ¿alguna vez se sentaron a escucharlos??, ¿alguna vez siquiera los tocaron??? Obviedades…
Pero tengo grandes ESPERANZAS... ESPERANZA en los nuevos “románticos”, ESPERANZA en los actuales y fundamentalmente ESPERANZA en los que lo fueron y quieren volver a serlo… Y yo soy uno de estos. Y se que mis ganas renacerán… Y renacerán gracias a la unión y al apoyo de mis verdaderos compañeros (no los que están detrás de un escritorio en el ministerio), los que de verdad se ponen la camiseta (léase ambos, chaquetas y delantales), los que se desvelan en las guardias, los que la pelean hasta el final en las terapias, los que pasan largas horas en los quirófanos, los MÉDICOS que mueren de a poco cada vez que uno de sus pacientes ya no puede respirar mas... En ellos CREO...
Desgraciadamente, las respuestas y soluciones las tienen los del escritorio. A ellos les pido con toda mi alma que no se olviden lo que Neruda dijo alguna vez: “Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera”. Cada una de esas flores somos nosotros y estamos permitiendo que llegue la primavera. Y cuando llegue lo hará vestida de dignidad sres. Llegará con o sin Uds. Llegará para que por fin todos y cada uno los trabajadores que uds. ven en la plaza sean reconocidos como realmente se lo merecen:
COMO LOS VERDADEROS DUEÑOS DE LA SALUD PÚBLICA..



“Lo único que necesita el mal para triunfar es que
los hombres buenos NO HAGAN NADA..”

AS.PE.RO

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Increible.. Sencillamente increible..

Anónimo dijo...

me siento completamente identificado con este escrito, siento, vivo el hospital como este y otros tamtos soñadores. Hoy más que nunca creo que tiene que salir gente que sienta el hspital publico de esta manera, que la hay y mucha.
A todos mis compañeros les digo que hoy se sientan parte de la historia y sobre todo hoy sientanse un autoconvocado más.

todos a la plaza.....

DANIEL dijo...

palabras mas palabras menos es el mejor paneo de la actualidad de la salud publica...creo que mucha gente piensa y siente con la misma pasion y romance que vos y es por eso que hoy somos una multitud enardecida por la injusticia la soberbia y el desamparo de como vos decis "los que estan detras de esos escritorios" sin embargo es hoy y sino nunca que podemos poner fin a esta tirania... UNAMOS NUESTRAS FUERZAS Y SIGAMOS HASTA EL FINAL. !FUERZA AUTOCONVOCADOS!!!

Heidi dijo...

Al Romantico del Hospital...yo tambien quiero mucho a mi Hospital...ojala que los sueños que soñamos hace un par de años se hagan realidad algun dia...pero para eso hay que tratar de hacerles entender a esta manga de creidos a politicos que de politicos no tienen nada, que estamos reclamando algo que es JUSTO.

Anónimo dijo...

Desde el sector de la medicina privada, va todo mi apoyo para la rebelion de las casacas blancas.

BASTA!.

Anónimo dijo...

Como no te van a quitar las ganas si te siguen denigrando y tratando como un ignorante. Yo tambien quiero a mi hospital pero todo tiene un limite, no se puede hacer crecer NADA sin por lo menos el minimo apoyo gubernamental. Y yo creo que es bueno recibir congratulaciones, ya que son estas las que te motivan a no seguir siendo un mediocre mas dentro de toda esta porqueria..

Unknown dijo...

Me siento totalmente identificada con cada una de las palabras que escribiste. Me conmovieron!!!!!
Ahora más que nunca a no bajar los brazos y a seguir luchando todos juntos!

MDP dijo...

Se me llenaron los ojos de lagrimas al leer este texto tan hermoso, soy joven y me siento plenamente identificada ya que trabajo en un hospital publico porque ME ENAMORE PERDIDAMENTE DE MI HOSPITAL desde mi primera guardia como practicante...locos, romanticos, idealistas y enamorados..porque otra razón pasariamos nuestros días en medio del dolor y la necesidad que vemos y vivimos junto a nuestros pacientes? Gracias doctor por expresar lo que sentimos todos los que trabajamos en un hospital publico! Nuestro ministro nunca entenderia esto y lo lamento por él que se pierde esta experiencia maravillosa.
PB: me gustaria saber quien lo escribio

Anónimo dijo...

Yo creo que se quien lo escribio. Y es del padilla jeje. Fuerza amigo

Anónimo dijo...

¡¡¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!!!
Nací hombre porque así Dios lo quiso y con el tiempo y sacrificio me hice MÉDICO, hoy soy hombre y médico, mi conocimiento me dio deberes, responsabilidades, alegrías y tristezas...pero seguí mis ideales de hombre...jamás dejaré de defender mis ideales, nací para servir y ayudar a mi prójimo. Hoy estoy en una LUCHA...la lucha de todos los hombres...luchar por la DIGNIDAD. Si el presente es luchar, seguiré luchando. Si ahora no logramos nada, no habrá nada para los que vienen detrás de nosotros. No importa que nos amenacen, los pueblos que han decidido luchar por su libertad y mantener la libertad alcanzada, pueden construir una vida nueva. Mantengámonos unidos y defendiendo lo de todos, como dijo el Ché Guevara "ESA BOLA IRA CRECIENDO CADA DÍA QUE PASE, ESA BOLA YA NO PARARÁ MAS"

auto.convocado@yahoo.com.ar